Mi autenticidad no es negociable

La autenticidad nos hace seres libres y felices, es una característica propia de quienes viven en coherencia entre lo que dicen y hacen, sin responsabilizar a sus padres, a su pareja, a sus hijos, a sus amigos o al estado de la consecuencia de su comportamiento o del rumbo que lleva su vida.

Lamentablemente muchos alguna vez hemos sacrificado nuestra autenticidad en busca de aprobación. Hemos callado y hasta hemos cambiado para agradarle a alguien.

Hoy en día resulta arcaico y difícil ser auténticos, porque el ser humano está inmerso en el consumismo, no solo me refiero a los asuntos materiales, sino a la influencia de las redes sociales las cuales nos bombardean con estilos de vida casi inalcanzables, cuerpos perfectos y rutinas “saludables” lo cual nos lleva a compararnos produciendo posteriormente disconformidad empezando por nuestro cuerpo llegando hasta molestarnos nuestro entorno (incluye familia, pareja y amigos). El concepto de autenticidad va quedando en el recuerdo gracias a nuestra vulnerabilidad ante lo que vemos.

La pregunta del día: ¿Qué contenido vemos a diario en redes sociales?

Muchos estamos enlazados con personas que muestran su día a día de manera frívola, claro que no todos se basan únicamente en ello ya que podemos encontrar contenido que aporta de manera positiva hecho por personas que asumen con responsabilidad el manejo de las redes sociales teniendo en cuenta que su material es visto por personas de diferentes edades. Para que no sea un trabajo tan difícil aprender a ser UNO MISMO, es importante “hacer limpieza” de todo aquello que consumimos visualmente.

PEQUEÑOS TIPS:

Finalmente, para empezar a ser auténticos debemos tener en cuenta lo siguiente: Dejar de lado modelos externos para evitar copiarlos y compararnos, conocer nuestros principios y ser fiel a ellos, aprende a decir NO (basta de querer "estar bien con todos”) y ser congruentes entre lo que pensamos, decimos y hacemos.